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14/1/15

RUTA QUEJIGALES-POZO NIEVE-CAÑADA DE LAS ÁNIMAS-QUEJIGALES ( SIERRA DE LAS NIEVES 5/01/2015)




Hola amigos de los Locandares.

Aquí os contamos una de las aventuras más bellas que hemos realizado.

Días atrás cayó en Sierra de Las Nieves una importante nevada y los locandares decidimos dirigirnos hacia allí para realizar una ruta invernal, algunos aún no habían tenido la experiencia de caminar en la nieve. Sin duda os lo recomendamos.

El Parque Natural de Sierra de las Nieves se halla en la Serranía de Ronda, en la provincia de Málaga. El parque ocupa una superficie de 20.163 metros cuadrados, entre los municipios de El Burgo, Istán, Monday, Paranta, Ronda, Tolox y Yunkera.
Territorio montañoso, donde se encuentra el bosque de Pinsapos, una especie exclusiva del Sur Peninsular.

La ruta es circular de una longitud aprox. de 12 km , con un nivel de dificultad ALTO y una duración aproximada de 5 horas.


Salimos desde Aznalcazar a las 6:00 de la mañana y sobre las nueve y media  llegamos al area recreativa de los Quejigales. Nos quedamos atónitos de la gran cantidad de nieve que había. Recordamos que años atrás tuvimos que subir la montaña para encontrar las primeras zonas con nieve.

Después de colocarnos las mochilas y hacernos la foto de rigor nos dispusimos a realizar la ruta que nos llevaría hasta la base del Torrecilla, por lo menos eso era nuestro objetivo aunque realmente no fue como lo planificamos.






Los primeros metros de la ruta cruzamos por un bosque de coníferas y tuvimos que tener mucha precaución al caminar por las placas de hielo que se habían formado en él.






!Mirad nuestro amigo Richard entre carámbanos!.


Tomamos altura por un sendero definido en zigzag siguiendo las pisadas de otros senderistas. Las vistas de Sierra de las Nieves desde la altura eran impresionantes. 






Nuestro amigo Isi haciendo la Cabra montesa.


El sendero se adentró en uno de los pinsapares más bellos de Sierra de las Nieves. Nuestro amigo Diego gran conocedor de los ecosistemas que hay en Andalucía nos enseñó que cuando un pinsapo se cae por los distintos tipos de acciones de la naturaleza, un rayo, etc ..... la Junta de Andalucía no recoge ese pinsapo caído, sino que ese terreno es repoblado de forma natural por otros pequeños pinsapos.





Nos recreamos en el paisaje que nos ofrecía el bosque de pinsapos, nuestra dirección era el Puerto de los Pilones que se encuentra a 1.750 metros de altura. Subimos por una pendiente bastante pronunciada.






Continuamos dirección hacia el puerto de los pilones, recreándonos en estas maravillosas estampas invernales que nos ofrecía Sierra de las Nieves.






El pinsapo es una especie de abeto sobreviviente de los últimas glaciaciones, es un árbol elegante de porte piramidal de hasta unos veinticinco metros de altura. La forma de  su copa es cónica y densa.





Después de una fuerte pendiente llegamos al Puerto de los Pilones. Subiendo los últimos metros encontramos algo de ventisca en lo más alto del Puerto.





Parte de los miembros del grupo ya en el puerto de los Pilones. Con una ventisca acentuada tuvimos que refugiarnos entre unas rocas a la espera de que llegaran nuestro amigo Isi y Richard.

Una vez todo el grupo y viendo como estaba la meteorología arriba en la montaña, decidimos llegar solo a pozonieves y desistimos llegar a la base del Torrecilla ya que el paso en la nieve era lento y se podía echar la tarde.





Desde el Puerto de los Pilones se puede ver el Torrecilla, Alcazaba y en días claros como era este el mar Mediterráneo.




 Seguimos dirección hacia el Pozo Nieve sorteando una bajada que incitaba a tirarnos en la nieve, e incluso hubo algunos del grupo que la hizo echándose una carrerita.





Por esta zona cuando la hemos cruzado en primavera o verano hemos encontrado una vegetación en forma de almohadillas conocida como piornales. Son plantas acostumbradas a estas bajas temperaturas ya que con esta gran nevada se encontraban sepultadas en nieve.

En esta zona de montaña encontramos los Quejigos (Quercuas Fagina Lam. o roble andaluz). Arbol de talla media, pero se puede encontrar ejemplares con porte arbustivo. Sus hojas son marcescentes ( Hojas de árboles y arbustos caducifólios que tras haber finalizado el periodo vegetativo y con el cambio de color del follaje, permanecen en el árbol en su gran mayoría durante toda la estación fría).



A unos metros llegamos al Pozo Nieve, con un poco de precaución ya que el sol había echo que en algunas zonas hubiera placas de hielo y no disponíamos de crampones.





Los Pozos de Nieve son unas sencillas construcciones circulares, de ocho y diez metros de diámetro, excavadas en la tierra y que suelen revestirse de piedras.

Estos pozos están ubicados en la cara norte de la montaña o umbría, pues aquí la humedad es mayor y la temperatura se mantiene más baja por el efecto de la menor insolación. En el interior se compacta la nieve hasta darle consistencia de hielo y se cubre con plantas del lugar y tierra apisonada. Así la nieve es almacenada hasta el verano.




 Una vez en el pozo nieve mientras descansábamos un poco, teníamos dos opciones para hacer la vuelta al Área recreativa de los Quejigales.

Volver por el mismo camino y rezar de no tener un resbalón por las placas de hielo en la bajada desde el Puerto de los Pilones hasta los Quejigales o dirigirnos dirección hacia la Cañada de las Ánimas una zona poco pateada y con menos posibilidad de encontrarnos placas de hielo.

Decidimos entre todos dirigirnos hacia la Cañada de las Ánimas y cruzar el pinsapar  que se encuentra en esa zona.





Antes de entrar en el Pinsapar de la Cañáda de las Ánimas decidimos comer algo para reponer fuerzas y descansar un poco. Sabéis lo bien que sienta un bocadillo con una sensación térmica de unos - 5º C.




Después de apaciguar un poco el hambre nos adentramos en el pinsapar, como esta zona estaba poco transitada pudimos disfrutar de unos paisajes nevados de verdadera belleza.





 Alucinante!, mucha nieve a nuestro paso, En algunos tramos se nos hacía difícil el caminar.


Seguimos dirección hacia los Quejigales, entre pinsapos ancestrales, donde por su antigüedad pierden ese porte piramidal y tienen esas formas retorcidas.






No todo fue camino de rosas, también hubo algunas caídas sin importancia que sacaron algunas risas al grupo.


Después de un paseo para no olvidar por el pinsapar de la Cañada de las Ánimas, enlazamos con el camino forestal que nos llevó de nuevo hacia el Área Recreativa de los Quejigales y final de nuestra ruta.






 Antes de marcharnos, no pudimos irnos sin saludar a un amigo.


Espero que os haya gustado.

Hasta pronto amigo de los LOCANDARES.

Fotos: - Ricardo Perea.
           - Isidoro Cabello.
           - J.A. Montero.

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