Hola Amigos de locandares aquí os cuento una nueva aventura de este grupo, que sin duda es una de las Rutas más duras y más emocionantes que hemos tenido hasta ahora.
La ruta se realizaba por el Parque Nacional de Sierra de Aracena y Picos de Aroche. Es una ruta Circular de una longitud de unos 38 km y una duración con paradas de 11 horas que comprende los pueblos de (Aracena- Linares de la Sierra- Alájar- Fuenteheridos- Los Marines- Aracena).
(La distancia que hay desde el km 30 hasta Aracena, no esta en el mapa señalizada por falta de batería del movil.)
Hay que dar las gracias a Angel (Centro de visitantes del Guadiamar) por las horas que le ha dedicado en planificar la ruta con los locandares. Y también dar las gracias a Manuel Pablo Martin (Senderos del Sur) por aclararnos algunas dudas de la ruta.
La ruta la llevamos a cabo (Richard, Diego, Gallego, Pelayo,Vargas, Roque, Montero). Habíamos quedado en el Bar Esencia a las 7 de la tarde para tomar un café y marchar a Aracena.
Llegamos a Aracena sobre las 8:30 de la tarde y aparcamos los coches en frente del parque de Bomberos que se encuentra ubicado en el Polígono industrial, situado en al noroeste de la ciudad.
Como Richard era compañero del cuerpo de bomberos, entramos en el Parque y pedimos información sobre el inicio del sendero de Aracena a Linares y con mucho gusto nos dio toda la información que necesitábamos.
Después de colocarnos las mochilas y hacernos la foto de rigor del grupo, tomamos dirección hacia el inicio del Sendero de Aracena- Linares de la Sierra.
(arriba de izquierda a derecha (Gallego, Diego, Pelayo, Roque), abajo de izquierda a derecha (Vargas, Montero, Richard))
Nos hicimos 3 kilómetros por las calles de Aracena hasta llegar al Cartel de la Junta de Andalucía donde comenzaba nuestra ruta.
El primer tramo de la ruta hasta llegar a Linares de la Sierra fue muy liviano ya que este pueblo se encuentra en un hondonal y todo el camino hacia Linares íbamos bajando.
En su recorrido nos encontramos al principio las dehesas y después las umbrías donde encontramos el sotobosque que lo forman (hiedra, zarzaparrilla, espino, brezo…) que acompañan a quejigos y alcornoques.
También nos llevamos una sorpresa, al encontrarnos por el sendero una estatua de la Virgen del Rocío.
Seguíamos caminando, deleitándonos de los magníficos paisajes de la sierra onubense, que los pocos rayos del sol nos dejaban ya ver.
Seguíamos caminando en dirección a Linares, encontrándonos postes indicativos de la ruta que seguíamos.
El sendero parecía un camino de cabras, lleno de piedras como decía nuestro amigo Richard. Llegando a Linares se nos hizo ya de noche y los últimos tramos lo hicimos ya sin luz natural.
Llegamos a la localidad de Linares ya con la noche cerrada. Recorrimos por esas calles estrechas y de gran belleza, recordando los pueblos típicos de la serranía onubense y nos dirigimos hacia la plaza del pueblo.
Una vez en la plaza paramos para descansar un poco y refrescarnos en la Fuente Nueva, donde las mujeres mayores del pueblo iban como antiguamente a recoger el agua para su consumo.
Después de descansar un poco, Roque que conocía el pueblo de haber estado en el en otra ruta, nos enseñó algunos encantos que tenía el pueblo de Linares de la Sierra como:
Una vez en la plaza paramos para descansar un poco y refrescarnos en la Fuente Nueva, donde las mujeres mayores del pueblo iban como antiguamente a recoger el agua para su consumo.
Después de descansar un poco, Roque que conocía el pueblo de haber estado en el en otra ruta, nos enseñó algunos encantos que tenía el pueblo de Linares de la Sierra como:
La Fuente Nueva.
Es una construcción en tres partes- la fuente con cuatro caños, el abrevadero y el lavadero circular. Se construyó en 1908.
La Iglesia Parroquial de San Juan Bautista.
La Iglesia Parroquial de San Juan Bautista.
Se levanta junto a las ruinas de otra de finales del s. XVIII, fue finalizada en 1843.
La Plaza de Toros.
La Plaza de Toros.
Adosada a la Iglesia se encuentra abierta e integrada a la población. Sirve de teatro al aire libre y otros eventos sociales.
Nos colocamos nuestros leds en la cabeza y saliendo del recinto urbano por el camino del cementerio encontramos el inicio del sendero que unía el pueblo de Linares de la Sierra con el pueblo de Alájar.
Entre charlas y risas el grupo iba avanzando hacia Alájar.
Aunque las montañas no dejaban ver el resplandor de la luna llena, pudimos apreciar las dehesas de alcornoques acompañados por otras especies como castaños, olivos o pinos. También la presencia de Quejigos, Robles, Sauces, Chopos entre otros.
Nos colocamos nuestros leds en la cabeza y saliendo del recinto urbano por el camino del cementerio encontramos el inicio del sendero que unía el pueblo de Linares de la Sierra con el pueblo de Alájar.
Entre charlas y risas el grupo iba avanzando hacia Alájar.
Aunque las montañas no dejaban ver el resplandor de la luna llena, pudimos apreciar las dehesas de alcornoques acompañados por otras especies como castaños, olivos o pinos. También la presencia de Quejigos, Robles, Sauces, Chopos entre otros.
El primer tramo de esta ruta se presentaba con una importante subida hacia el puerto o punto más alto de la ruta, donde se podía apreciar unas bellas vistas de una Linares de la Sierra iluminada en la noche.
Al terminar la subida que dábamos con la carretera, nuestro amigo Roque nos dijo que teníamos que bordear la carretera por un pequeño tramo de escalones.
Al terminar la subida que dábamos con la carretera, nuestro amigo Roque nos dijo que teníamos que bordear la carretera por un pequeño tramo de escalones.
El siguiente tramo hasta llegar a Alájar era una bajada pronunciada, donde los dedos de los pies se clavaban en las botas haciendo de freno.
En el descenso pudimos disfrutar a la vista de algunos castaños, el árbol emblemático del parque natural.
Sobre las 00:00 de la noche llegamos al pueblo de Alájar,
Donde se podía apreciar el famoso escarpe que engrandece el nombre de este pueblo, la Peña de Arias Montano que toma el nombre del humanista y secretario de Felipe II que pasó en Alájar sus últimos años.
( Peña de Arias Montano iluminada al fondo de la calle.)
Andando por las calles de este precioso pueblo, llegamos a la plaza, donde hicimos una parada para descansar y comer algo para reponer fuerzas.
Nos sentamos en las mesas y empezamos a sacar los bocadillos y unas tortillas que llevaba nuestros amigos Gallego y Vargas, con el pertinente permiso del dueño del bar.
Pedimos un par de platos de patatas aliñas y un par de Jarras de Cervezas. ¡Como sentaron!.
Sobre las 00:00 de la noche llegamos al pueblo de Alájar,
Donde se podía apreciar el famoso escarpe que engrandece el nombre de este pueblo, la Peña de Arias Montano que toma el nombre del humanista y secretario de Felipe II que pasó en Alájar sus últimos años.
( Peña de Arias Montano iluminada al fondo de la calle.)
Andando por las calles de este precioso pueblo, llegamos a la plaza, donde hicimos una parada para descansar y comer algo para reponer fuerzas.
Nos sentamos en las mesas y empezamos a sacar los bocadillos y unas tortillas que llevaba nuestros amigos Gallego y Vargas, con el pertinente permiso del dueño del bar.
Pedimos un par de platos de patatas aliñas y un par de Jarras de Cervezas. ¡Como sentaron!.
Aquí paso una de las anécdotas de la noche, que cuando iba a sacar mi bocadillo de la mochila me lo había dejado en el coche del Richard, entre risas mis amigos del grupo me ofrecieron la comida que llevaban.
Después de descansar un poco, y apagar el gusanillo del hambre nos colocamos nuestras mochilas y seguimos nuestra caminata en dirección Fuenteheridos.
No antes le preguntamos al camarero del bar, donde empezaba el sendero del Calabacino el cual muy amable nos los señalizó.
Hay que decir que en esta parte de la ruta entre Alájar y Fuenteheridos, no estaba señalizado el sendero por la Junta de Andalucía.
Después de descansar un poco, y apagar el gusanillo del hambre nos colocamos nuestras mochilas y seguimos nuestra caminata en dirección Fuenteheridos.
No antes le preguntamos al camarero del bar, donde empezaba el sendero del Calabacino el cual muy amable nos los señalizó.
Hay que decir que en esta parte de la ruta entre Alájar y Fuenteheridos, no estaba señalizado el sendero por la Junta de Andalucía.
Entre los concejos de Angel y Manuel Pablo Martín nos propusimos primero a coger el sendero del Calabacino donde después teníamos que encontrarnos con el Sendero de la Urralera el cual nos llevaría al pueblo de Fuenteheridos.
Aquí nos pasó otra de las anécdotas de la ruta ¡NOS PERDIMOS!.
Cuando íbamos por el sendero del Calabacino nos salió una bifurcación a la derecha donde aparecía una flecha con un dibujo, mira que lo señalizamos con nuestras luces pero seguimos para delante creyendo que nos llevaría al sendero de la Urralera, el cual no fue así.
Después de andar un kilómetro aproximadamente y abrir un par de cancelas, se nos acabó el sendero cerca de una casa perdida en medio de la Sierra.
Entre risas y llenos de arañazos de la cantidad de matorral que había, Gallego y Pelayo dieron una visual del terreno para ver si encontraban un camino. La suerte nuestra fue que no dieron con algún camino, porque si no sabría Dios donde habríamos llegado.
Entre risas y llenos de arañazos de la cantidad de matorral que había, Gallego y Pelayo dieron una visual del terreno para ver si encontraban un camino. La suerte nuestra fue que no dieron con algún camino, porque si no sabría Dios donde habríamos llegado.
El grupo tomó la decisión de volver hacia atrás y retomar el sendero del Calabacino y cual fue nuestra sorpresa que cuando llegamos a la bifurcación que habíamos dejado atrás la flecha nos indicaba el calabacino.
Entre risas, el grupo tomó un pequeño descanso antes de seguir por el camino del calabacino.
Ya retomando el sendero del calabacino de nuevo, teníamos que estar atento a un camino que se iba a unir a la derecha del nuestro que provenía de la Peña de Arias Montano.
Ya retomando el sendero del calabacino de nuevo, teníamos que estar atento a un camino que se iba a unir a la derecha del nuestro que provenía de la Peña de Arias Montano.
Después de encontrarnos esa bifurcación, nos dirigimos hacia otro punto de la ruta donde nos íbamos a encontrar otra bifurcación donde aparecería unos carteles donde indicaba a la derecha el Castaño del Robledo e izquierda Fuenteheridos y este camino se uniría con el sendero de la Urralera.
Durante el trayecto vimos Castaños milenarios que nos indicaban que estábamos cerca del pueblo del Castaño del Robledo
También nos encontramos bastantes Tarántulas por el camino.
Pero esa bifurcación no la vimos y desembocamos a la carretera.
Un poco desorientados y sin saber en que lugar nos encontrábamos, nuestro amigo Diego sacó a través del GPS del móvil el punto donde nos encontramos y nos dijo al grupo que estábamos cerca de Fuenteheridos.
También nos encontramos bastantes Tarántulas por el camino.
Pero esa bifurcación no la vimos y desembocamos a la carretera.
Un poco desorientados y sin saber en que lugar nos encontrábamos, nuestro amigo Diego sacó a través del GPS del móvil el punto donde nos encontramos y nos dijo al grupo que estábamos cerca de Fuenteheridos.
Al no encontrar sendero ninguno cerca que nos llevará a Fuenteherido, el grupo decidió hacer 3 km por carretera y enlazar a Fuenteheridos.
Sobre las 4 horas de la mañana aproximadamente llegamos a Fuenteheridos y nos dirigimos hacia la plaza principal donde se encuentra la fuente de los doce caños, monumento emblemático de dicho pueblo.
Después de descansar y rellenar de agua nuestras botellas nos dispusimos a seguir nuestra andadura-
Después de descansar un poco y volver a ponernos otra vez en marcha, ocurrió otra de las anécdotas de la noche.
Cuando Diego me pide el plano donde nos indicaba el camino que había que salir de la Plaza de Fuenteherido, en dirección al sendero de Aracena y cual fue nuestra sorpresa que el plano se había caído de mi mochila por el camino.
Ósea nos encontramos a las 4 horas de la mañana y sin saber que dirección íbamos a coger. Menos mal que apareció en la plaza un chaval y nos dijo la dirección a tomar para llegar al inicio de dicho sendero. ¡QUE SUERTE!.
Emprendimos la marcha por el sendero en dirección a Aracena y fin de nuestra ruta. Entre risas y ya un poco cansados tomamos dirección al pueblo de los Marines, punto medio de la ruta de Fuenteheridos-Aracena.
Después de unos kilómetros llegamos a la parte alta de los Marines, una zona del pueblo muy bonita donde había una fuente en la cual repusimos agua y descansamos un poco.
Después de descansar, nos dispusimos a continuar nuestra andadura ya cada vez con menos fuerzas en nuestras piernas.
En la parte baja del pueblo de los Marines nos pasó la ultima de las anécdotas de la noche, ya que el sendero tocaba al pueblo por una calle y después había que girar a la derecha, y retomar de nuevo el sendero, pero cuando llegamos a la calle, no encontramos señalización alguna.
Sobre las 4 horas de la mañana aproximadamente llegamos a Fuenteheridos y nos dirigimos hacia la plaza principal donde se encuentra la fuente de los doce caños, monumento emblemático de dicho pueblo.
Después de descansar y rellenar de agua nuestras botellas nos dispusimos a seguir nuestra andadura-
Después de descansar un poco y volver a ponernos otra vez en marcha, ocurrió otra de las anécdotas de la noche.
Cuando Diego me pide el plano donde nos indicaba el camino que había que salir de la Plaza de Fuenteherido, en dirección al sendero de Aracena y cual fue nuestra sorpresa que el plano se había caído de mi mochila por el camino.
Ósea nos encontramos a las 4 horas de la mañana y sin saber que dirección íbamos a coger. Menos mal que apareció en la plaza un chaval y nos dijo la dirección a tomar para llegar al inicio de dicho sendero. ¡QUE SUERTE!.
Emprendimos la marcha por el sendero en dirección a Aracena y fin de nuestra ruta. Entre risas y ya un poco cansados tomamos dirección al pueblo de los Marines, punto medio de la ruta de Fuenteheridos-Aracena.
Después de unos kilómetros llegamos a la parte alta de los Marines, una zona del pueblo muy bonita donde había una fuente en la cual repusimos agua y descansamos un poco.
Después de descansar, nos dispusimos a continuar nuestra andadura ya cada vez con menos fuerzas en nuestras piernas.
En la parte baja del pueblo de los Marines nos pasó la ultima de las anécdotas de la noche, ya que el sendero tocaba al pueblo por una calle y después había que girar a la derecha, y retomar de nuevo el sendero, pero cuando llegamos a la calle, no encontramos señalización alguna.
El grupo a las 6:00 horas aproximadamente y sin saber otra vez por donde enlazar el sendero que nos llevaría a Aracena y final de nuestra ruta.
Entonces apareció la imagen importante de nuestro amigo Diego que después de esta ruta se ha convertido el Capitán Cartógrafo del grupo , el cual con mapa en mano y brújula nos dirigió hacia la carretera de Cortelazor, donde según él era la carretera que atravesaba el sendero que teníamos que coger hacia Aracena.
Entonces apareció la imagen importante de nuestro amigo Diego que después de esta ruta se ha convertido el Capitán Cartógrafo del grupo , el cual con mapa en mano y brújula nos dirigió hacia la carretera de Cortelazor, donde según él era la carretera que atravesaba el sendero que teníamos que coger hacia Aracena.
Algunos miembros no estaban muy seguro de lo que Diego decía y veían que iban hacer unos pocos de km más de la cuenta, pero después de que Diego nos dijera que a un km y medio nos iba a aparecer el camino y así sucedió todo el grupo se puso a aplaudir.
Retomamos el sendero dirección a Aracena, comentando de la proeza de nuestro amigo Diego y seguíamos andando entre muros de piedra en donde a los lados se podían apreciar Castañales.
Ya de día y después de tener que subir un tramo de sendero que nos parecía eterno sobre las 8:00 horas de la mañana nos encontramos con el pueblo de Aracena y fin de nuestra ruta.
Hasta otra amigos de locandares.
PEDAZO DE RUTA. !UNA AUTENTICA AVENTURA DE LOCANDARES!.
ResponderEliminarNo habia podido verla hasta hoy.
ResponderEliminarMuy guapa la ruta.
Vaya carita teneis en la foto sentados en la fuente de los marines, jajaja.
Saludos.